Camina en la naturaleza.
En espacios poco habitados.
Y si puedes, hazlo solo.
Hazte ese regalo.
Pasamos mucho tiempo acompañados por otros.
Además de estar rodeados de continua información.
Información que sale cual grifo abierto.
¿Discernimos todo eso que nos entra por los sentidos?
Siempre, en definitiva, oyendo a otros.
Estar contigo.
Estar presente.
Esta es la invitación.
¿Qué sucede cuando te habitas?
¿Qué sucede cuando te escuchas conscientemente?
Llévalo a la práctica,
Y si quieres, si te apetece, después, me cuentas.
Mi experiencia, solo una experiencia recuerda,
Me dice que, al caminar solo en mi propia compañía,
Surgen todas esas ideas.
Ideas que quizás por falta de silencio y no tiempo,
No llegan a ver la luz.
Siento como la creatividad se dispara.
Siento la energía que emana.
¿De dónde?
No lo sé con certeza.
Pero siento que tiene que ver con ese TODO.
Ese TODO y esa NADA.
Ese vacío que todo lo abarca,
Que todo lo abraza,
Dándote cuenta de que no existe tal separación.
No-dos.
¡Qué ilusión esto de vendernos la separación!
La vivencia del día a día me dice:
Grandes ideas florecen al caminar.
¡Camina!
¡Atrévete a escucharte!
¡Habítate!
¡Haz de ti el más confortable hogar aquí en la tierra!
Deja que el silencio te atraviese,
Que te lleve al lugar que seguramente jamás pudiste imaginar.
Suelta y salta.
Deja que nuevas puertas se abran.
Eres pura creatividad.
Un profundo abrazo,
Patricia.